Por Claudio Vargas Mancilla
Trabajador Social
Universidad de Los Lagos
Ya
habiendo transcurrido un par de días desde conocidos los resultados obtenidos
por las coaliciones Chile Vamos y Frente Amplio, el pasado 02 de julio, me es
posible comentar de manera somera los números que dejó la jornada clave para
las proyecciones de ambos bloques políticos.
Partiré
por Chile Vamos, con tres candidaturas asimétricas en sus discursos y proyectos “liberales”, las
candidaturas de Manuel José Ossandon y Felipe Kast provocaron en más de alguno una
sensación de madurez y evolución ideológica, que se encaminaron hacia una
derecha enfocada en el desarrollo humano y ético, por sobre el enfoque economisista
casi absolutista de Sebastián Piñera y de la derecha ortodoxa. Es decir, el
sabor de boca que dejan las candidaturas de Ossandon y especialmente la de Kast,
es que se aprecia un desarraigo considerable de las ideas de derecha y los
planteamientos “made on Friedman” predicados por la generación anterior a la de
los Chile Vamos millennials.